¡ Virgen Santa del Carmelo, acogenos bajo tu manto!

VIRGEN DEL CARMEN, TE PEDIMOS POR EL PROGRESO ESPIRITUAL Y MATERIAL DE ESTE ¡TU CHIVILCOY!

CARTA PRESENTACIÓN DE LA MISIÓN CONTINENTAL ARQUIDIÓCESIS MERCEDES - LUJÁN


" MISIÓN CONTINENTAL, IGLESIA EN ESTADO DE MISIÓN PERMANENTE"


Queridos sacerdotes, diáconos, comunidades religiosas, fieles laicos

1. El acontecimiento de Aparecida nos invita como Iglesia a renovar nuestro ardor apostólico y nuestro fervor: "No podemos callar lo que hemos visto y oído" (Hech. 4, 20).

Cada uno de nosotros sabe lo que es "evangelizar", pero la novedad está dada por los desafíos que nos marca el tiempo presente, esta es la maravilla de la presencia del Espíritu en la Iglesia que sopla para encontrar lo nuevo en lo ordinario, renovando lo cotidiano, porque es Cristo el que hace nuevas todas las cosas.

La Iglesia en América Latina, reunida en el Santuario de Aparecida en mayo de 2007, nos viene a decir que la novedad está en definir la identidad cristiana desde la única vocación de discípulos y misioneros de Jesucristo "la fuerza de este anuncio de vida será fecunda si lo hacemos con el estilo adecuado, con las actitudes del Maestro, teniendo siempre la Eucaristía como fuente y cumbre de toda actividad misionera" (DA 363).

2. Ante esta invitación a la misión continental, es que como arquidiocesis nos sumamos al envío de evangelización, impulsando nuestro fervor mediante una misión diocesana. Quisiera que trabajemos juntos, como discípulos misioneros del Señor para que su Vida se prolongue en nuestra arquidiócesis y abundantemente podamos dar los frutos que el Señor espera.

Creo necesario subrayar una vez más que no se trata de una misión concebida como un trabajo puntual en un espacio determinado y durante un tiempo (tres o seis meses en este determinado territorio) sino mas bien es una misión que comprende una actitud vital: lo que hemos visto, lo que hemos contemplado es lo que les anunciamos (1 Jn. 1, 1-4). Tampoco se trata de salir a misionar porque "no tenemos fieles en nuestras comunidades", sino porque plenificados por Jesús, queremos darlo a conocer a todos: es lo mejor que nos pasó y nuestra alegría mayor es comunicarlo (cfr. Aparecida, 29).

El proyecto arquidiocesano de la misión continental, tendrá como eje central la invitación realizada por nuestros obispos en Aparecida de ser discípulos misioneros. Esta vocación cristiana de anunciar la Buena Nueva aparece reflejada en un tríptico que, junto a la imagen peregrina de la Virgen de Luján, visitará a cada una de nuestras parroquias.

La peregrinación del ícono entre las parroquias, se trata de una verdadera catequesis en imágenes. Cada detalle esta lleno de belleza y de simbolismos, siendo la tónica de todo el conjunto principalmente bíblica. Esta forma de presentar el evangelio es muy antigua en la Iglesia, y lo que pretende es anunciar el evangelio desde imágenes sobre la vida del Señor. El encuentro de la comunidad con el ícono la conduce a experimentar la alegría del encuentro con el mismo Cristo, de su presencia, y a proclamarlo como la mejor y la más feliz noticia que puede anunciar.

Se enviarán a cada parroquia sugerencias para vivir más plenamente ese encuentro, una serie de subsidios que proponen distintas actividades, entre ellas, un encuentro de formación para quienes misionen, guiones para las celebraciones eucarísticas misioneras, un esquema del rezo del Santo Rosario misionero en torno al ícono, y oraciones para las familias que recibirán réplicas del mismo.

3. Como hemos compartido en la Misa Crismal (20/04/2011) el recorrido comenzará en la zona Junín, desde el 7 de mayo hasta el 24 de julio, desde allí seguiría la zona Chivilcoy y así sucesivamente, según la vecindad de las localidades. No hay una fecha determinada para finalizar. Solo recomiendo una semana por parroquia (modo de sugerencia)

4. Sin embargo, la propuesta de Aparecida es más audaz, va más allá de una misión programática aunque no la excluye, no está limitada en el tiempo, sino pensada de forma tal que después que se inicie continúe, que sea una misión permanente. No se trata de una misión convencional, sino el comienzo de algo con proyección indeterminada. Invita no sólo a las actividades propuestas en los subsidios, sino a una vida como discípulos misioneros, haciendo actual el envío de Cristo "Vayan y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos" (Mt. 28, 19).

5. Por ello, hoy más que nunca, es necesario un camino de "conversión pastoral", que genere en todo agente evangelizador la conciencia de esta vocación de discípulos misioneros. El vínculo con Jesús en la dimensión discipular se hace vínculo misionero con los hermanos para presentarles el amor y la bondad de Dios.

Nos encomendamos a nuestra madre, la Virgen de Luján, para renovar nuestra vocación misionero y transmitir el evangelio de Cristo para "que todos en el tengan vida".

Los bendigo y les pido que recen por mi tarea como pastor.


+ Mons. Agustín R. Radrizzani
Arzobispo de Mercedes - Luján